El simple acto de sentarse bien. Etiqueta de Negocios

Por Pilar Richardson
Actualizado Abril, 30, 2024

La manera de sentarnos es también una forma de comunicación como parte de lenguaje corporal. Lo mismo que los gestos, las expresiones faciales, el movimiento de las manos, la vestimenta, el contacto visual, entre otros; una buena postura al sentarnos tiene una forma poderosa a la hora de alcanzar objetivos y simplificar el camino hacia el éxito. Por tanto, sean asientos individuales, sillones giratorios, con respaldo alto, sillones con brazos, sin brazos, sofás, taburetes o cualquier otro asiento, que tu lenguaje corporal proyecte confianza. 

Veamos cómo ser mejores comunicadores - hombres y mujeres. 

La postura equilibrada, digna y segura.

La mejor postura es la natural, por supuesto. Al ingresar en una habitación, escoge la silla o sofá que mejor se adapte a ti. Sin contemplarla demasiado, acércate con confianza, mirando discretamente a tu entorno. Desciende en forma suave y gentil con la espalda derecha, no forzada, los hombros hacia abajo y hacia atrás y las piernas juntas. No es necesario tocar el fondo del asiento, pero tampoco sentarse al filo. Socialmente estas posturas 

Que tu postura guarde siempre un equilibrio, pero que además, sea digna y confiada.

Las manos en el regazo.

Al sentarte, trata de colocar las manos sobre el muslo, una sobre otra, palmas abajo o una sobre otra, palmas arriba, pero que se vean relajadas. Para que exista armonía, coloca las manos sobre el muslo contrario evitando jugar o gesticular demasiado. 

No te equivocarás con estas posturas que realmente guardan la postura equilibrada y causan buena impresión.  Lo clave para estas posturas es que las rodillas estén pegadas y que conserves una forma diagonal. ¡Practica!

Estas son buenas posturas. Una mujer profesional, para ser tomada en serio, va a poner los pies apoyados en el piso (con las rodillas juntas). Mejor dicho, ¡que los pies estén bien puestos sobre la tierra!

O esta pose inclinada que no rompe la postura.

Una buena postura permite conectarnos con quienes hablamos o a quienes nos dirigimos de forma segura y confiada. 

La Postura en la mesa

Una vez sentado en la mesa, siéntate en una posición recta, casi sin tocar el espaldar de la silla, los codos junto al cuerpo y las muñecas apoyadas en el borde de la mesa; los codos solamente entre platos. Especialmente en invitaciones formales o en restaurantes, que los pies estén bien apoyados en el piso, no cruces las piernas ni las enrolles, peor alrededor de la silla, puedes incomodar y desagradar a la persona de al lado.

Siendo educado en comidas de negocios

Si bien socialmente sigue siendo educado ayudar a una mujer a sentarse en su silla, en negocios, antes de que la situación se torne incómoda y confusa, pregunta: ¿quieres que te pase una silla? Ella tendrá la opción de decir: "si, gracias" o "no gracias, pero eres muy gentil".  A veces, es mejor concentrarse en el propósito esencial de la ocasión, que es la de construir una relación de negocios sólida. 

Las malas posturas.

Todas estas malas posturas, pueden mostrar desinterés, inseguridad, timidez, cansancio y actitud de aprensión u ofensa:

• Repantigarse en el asiento y peor en la mesa. 
• Sentarse con las rodillas separadas.
• Sentarse muy al borde del asiento mostrando timidez.
• Evitar balancearse en la silla y mucho peor en la mesa.
• Hacer movimientos involuntarios con las piernas o los pies. 
• Tocarse el cabello o partes del cuerpo mostrando inseguridad.
• Tampoco menees los pies que denota nerviosismo ni menos dejar que uno de los zapatos se salgan y jugar con él.
• Sentarse con el saco abrochado -tanto varones como mujeres, ¡desabrochen!

Los varones lo mismo, opten por una postura confiable y segura. En este mundo competitivo, necesitas todas las ventajas de tu competencia! Abriendo las piernas sentándose en forma demasiado cómoda con los brazos encima de los brazos del sillón, puede invadir un espacio territorial y ofender a los demás.

La manera en que te sientas es la manera de cómo eres recibido por otros.

Esta pose "cruzada en cuatro" es una buena postura para entrevistas, por ejemplo. 

La suela del  zapato que cruza, que esté apuntando hacia abajo, hacia el piso. 

Sentarse con cruce de rodillas, te hace ver fino, relajados, más cómodo y profesional. Es una pose para sentarse algo más erguida pero también más confiado.

Sea cual fuere el ambiente o el lugar donde te encuentres, te recomiendo que sólo ocupes el área del ancho de tu silla. Después de todo, son modales básicos, y los modales no se tratan de la comodidad personal, sino de la consideración por los que están cerca. 

Una postura correcta, agraciada y cortés, tiene el beneficio adicional de hacernos ver bien, pero de sentirnos bien. Ya verás que a largo plazo te beneficiará...¡no digo más!

Fotos:SenoraEtiquetaCollection
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